LOS MURCIÉLAGOS COMO FUENTE DE VIRUS PATÓGENOS

LOS MURCIÉLAGOS COMO FUENTE DE VIRUS PATÓGENOS

Los murciélagos, tan en boga hoy en día porqué se les acusa de ser los “responsables” de la aparición del Covid-19, son unos mamíferos euterios agrupados en el orden de los quirópteros, taxón que comprende más de 1.100 especies en todo el mundo, adaptadas a un amplio espectro de hábitats y tipos de recursos alimentarios. Se caracterizan por ser el único grupo de mamíferos adaptado al dominio aéreo.
No se ha probado a ciencia cierta que sean responsables del origen del coronavirus que nos afecta hoy en día, pero son sospechosos habituales porque ya han propagado anteriormente otros tipos de coronavirus, como fueron el SARS y el MERS, ambos en este siglo. También se ha analizado el genoma de este coronavirus y es muy similar al de otros coronavirus propagado por murciélagos.
Su papel como propagador u originador de virus, no se limita únicamente a los coronavirus, puesto que han propagado otras enfermedades. Una de ellas es el rabia. La rabia es una enfermedad neurotrópica originada por virus del género Lyssavirus que afecta el sistema nervioso de los mamíferos. Los quirópteros actúan de reservorios de Lyssavirus en la mayoría de los continentes habitados. Seis de los siete genotipos de Lyssavirus descritos se han aislado en murciélagos. También de la familia de la rabia, los murciélagos propagan otros Lyssavirus como son el Virus Lagos bat, Virus Mokola o Virus Duvenhage entre otros.
También los científicos sospechan que también pudieron ser el origen del Ébola.
Entre los factores que les hace que sean portadores de virus destacan los siguientes. En primer lugar, por su gran tolerancia a virus, superior a otros mamíferos. Esta tolerancia tiene que ver con su capacidad de volar. Al adaptarse al vuelo, su sistema inmunitario se reforzó. Esto les permite transportar virus sin enfermar, por lo cual son buenos vectores de transmisión.
Por otro lado, su gran abundancia facilita esta transmisión. Son cerca de una cuarta parte del total de los mamíferos, únicamente los roedores son más abundantes que ellos.
Además, su capacidad de volar ayuda a dispersar las enfermedades, principalmente, a través de sus heces.
Por último, debido a su dieta insectívora, parte de estos insectos de los que se alimentan, son portadores de dichas enfermedades.
No todo es su culpa. El murciélago está cogiendo este protagonismo como vector de enfermedades por culpa de la inconsciencia del ser humano, bien porqué consume su carne o porqué invade y destruye sus hábitats. Si el ser humano no tuviera este papel tan invasor y destructor de hábitats, el radio de propagación de los murciélagos sería mucho menor, ya que no se moverían de unas zonas delimitadas, sin embargo, al destruir sus hábitats, deben buscar un nuevo hogar. Y es en este viaje, en esta búsqueda, donde propagan, entre otras, las enfermedades mencionadas en este documento.

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